Un pequeño grupito nos reunimos en El Real de la Jara para disfrutar de una noche repleta de meteoros, que identificamos en su mayor parte con las lluvias de estrellas Delta Acuáridas y Perseidas. Fue un continuo durante toda la noche, regalándonos algún bólido que arrancó gritos de sorpresa por parte de los elegidos que en ese momento quiso la fortuna que coincidieran sus miradas con la zona de la trayectoria. Y es que no hay más fórmula para disfrutarlas, o estás mirando en el momento justo en la zona adecuada, o te la perdiste, y esa ya no te dará otra oportunidad para verla.
Por mi parte, pude romper con una ley no escrita en la que "Si quieres ver meteoros... Mira siempre en sentido contrario donde yo esté mirando!😂
La noche fue avanzando y la Vía Láctea ganó altura, resultando cada vez más nítida y contrastada sobre el fondo oscuro del firmamento. Desearía poder expresarlo como Lorca en su poema "Santiago":
-Madre abuela, ¿Cuál es el camino,madre abuela, que yo no lo veo?
-Mira bien y verás una cinta
de polvillo harinoso y espeso,
un borrón que parece de plata
o de nácar. ¿Lo ves?
-Ya lo veo.
Nos dedicamos a observación visual; Pepa, Luís Lucero, Inma, Conso y el que suscribe esta crónica. Por parte de los astrofotógrafos solo Jesús y Vicente, raro es ya que los visuales ganen en número a los astrofotógrafos... Pero para ambos grupos, el amor por el cielo estrellado nos une en especial comunión.
Me acordé durante la noche de las palabras que había leído días antes en un poema de Ibn Hazm:
Pastor soy de estrellas, como si tuviera a mi cargoapacentar todos los astros fijos y planetas.
Las estrellas en la noche son el símbolo
de los fuegos de amor encendidos en la tiniebla de mi mente.
Parece que soy el guarda de este jardín verde oscuro del firmamento,
cuyas altas yerbas están bordadas de narcisos.
Si Tolomeo viviera, reconocería que soy
el más docto de los hombres en espiar el curso de los astros.
De los objetos observados, como es habitual en estas fechas estivales, los ya clásicos y que en anteriores crónicas ya he tratado (Nebulosa Laguna, Trífida, Galaxia de Andrómeda, etc) y que no me repetiré en esta, aunque tampoco lo pretendía ya que solo quería plasmar en palabras las sensaciones de una agradable cena bajo las estrellas entre amigos.
Tan solo haré una parada en una estrella doble que mi compañera de observaciones traía para observar, se trata de Eta Cassiopeiae (Achird):
Ubicada entre las estrellas Shedar y Navi de la constelación de Casiopea, esta estrella binaria presenta un contraste de colores bellísimo, oro para la primaria y granate para la secundaria. La diferencia de tamaño entre ambas las hace más vistosa si cabe. A 76 aumentos la separación entre las dos componentes es notable, no merece la pena subir de aumentos para no perder la belleza del conjunto.
A medida que Pepa iba leyendo datos de las dos componentes; "separación entre ambas semejante a la separación entre nuestro Sol y Neptuno, semejanza casi idéntica de la principal con nuestro Sol, el tamaño equivalente a cinco lunas llenas que tendría la secundaria desde un hipotético planeta de la estrella principal", hacía que mientras la observaba mi imaginación volara hasta el sistema binario, realzando la belleza del conjunto!😍
La noche acabó de la mejor manera posible, con unos cafés y churros en el Ronquillo que sentaron mejor que bien 😋
Un saludo,
Deseando volver asentirme pequeñito bajo el firmamento!
Equipo utilizado:
Telescopio Dobson LB12” con buscador Lunático EZG-60.
Oculares: Moonfish 30mm (47 aumentos), Meade 26mm (58 aumentos), Nagler 20mm (76 aumentos), Explorer Scientific 14mm (108 aumentos), Explorer Scientific 8,8mm (173 aumentos), Hyperion 5 mm (304 aumentos), Barlow 2x Celestron Ultima.
Filtros: UHC 2” (Astronomik), OIII 2” (Baader)
Me alegro mucho que vuelvas , ya coincidiremos
ResponderEliminarGracias! Aunque no aparece quién eres 😄
EliminarGenial esa crónica Manuelcomo es habitual en ti, ya tenía yo ganas de leer algunas pues hacía tiempo ya que no lo hacía, un abrazo y nos vemos pronto
ResponderEliminarGracias Manolo!!
EliminarSiempre genial!
ResponderEliminarY con las ganas de poder coincidir algún día en una escapada
Por cierto, desconocía esa faceta tan poética 😉
Gracias Antonio!!
EliminarGracias por esta crónica, que nos ayuda a mantener la afición a los que estamos en dique seco :)
ResponderEliminarGracias Javier!! ☺
EliminarSiempre disfruto con tus crónicas Manuel, transmites con sensibilidad y nos haces viajar a esos momentos tuyos, y es como volver a revivir muchos momentos mágicos cuando salía de observación. Muchas gracias
ResponderEliminarGracias Belén!! ☺
EliminarPrecioso recuerdo de aquella noche de verano. Nadie como tú para hacer revivir la magnífica noche de tertulia, estrellas fugaces y paseos por el camino de plata celestial.
ResponderEliminarSi hubiera una ACOD, (Astro "Crónica" of the Day) sería para ti sin duda.
Y gracias por acompañar tu relato con nuestras fotillos. Un honor
Gracias Pareja!! Por pasar a leerla y por el reportaje fotográfico, sin ellos quedaría bastante sosa para mi gusto 😘
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